La OMS (Organización Mundial de la   Salud) refiere que para poder hablar de dependencia han de presentarse   tres o más de los siguientes criterios en un periodo de 12 meses:
  Fuerte deseo de consumir la sustancia (Craving). 
  - Dificultades para controlar dicho consumo. 
 
    - Síndrome de abstinencia al   interrumpir o reducir el consumo. 
 
    - Tolerancia. 
 
    - Abandono progresivo de intereses ajenos al consumo de la sustancia.   Inversión cada vez mayor de tiempo en actividades relacionadas con la obtención   de la sustancia o con la recuperación de sus efectos. 
 
    - Persistencia en el uso de la sustancia a pesar de percibir de forma clara   sus efectos perjudiciales. 
 
  
  Los anteriores criterios hacen referencia tanto a aspectos relacionados con   la dependencia física como con la psicológica.